Es un proceso mediante el cual se realizan reparaciones rápidas y eficientes; donde el tiempo es nuestro principal aliado (máximo 2 horas) y la calidad se mantiene.
Se trata de un proceso diferente con cantidad mínima de pintura acompañada de materiales especiales de secado inmediato; donde se obtiene una película uniforme e intacta del mismo color que no se denote diferencia.
Este pequeño reparo pretende cubrir daños menores como portazos, golpes de piedras y objetos en la carretera y choques a baja velidad; así como vandalismos.